Hay una mosca en
mi cuarto que me obliga a escribir
Se posa sobre mi
espalda y me obliga a levantarme
Yo le digo que
vivir es escribir, que dormir es escribir
Ella no me hace
caso y me sigue molestando
Finalmente lo ha
conseguido
Ha conseguido que
me levante
Que lo haga medio
dormido
Y que hable de
cosas importantes
Pero ahora quiere
joderme
Me molesta, no me
ayuda a concentrarme
Me molesta
mientras lo intento
Y las palabras
desaparecen de mi mente
cuando ella me
toca
Pienso hacer algo
de inmediato
abriré la ventana
de mi habitación
para que la mosca
se pueda marchar
y así poder escribir
sin presiones
El caso es que
liberaba la palabra,
reproducía la
frase
Me ayudaba con el
sentido del poema
la dirección de
las cosas
y ahora ya no
está
se ha marchado
y me ha dejado
con la palabra en la boca.
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El azul del cielo
se funde en grises
con las montañas
del fondo
Una fachada clara
e iluminada por el sol
me deslumbra y termino el poema.
…
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